La literatura nos proporciona ejemplos muy interesantes sobre la estrecha relación entre el roble y la figura del rey. Un ejemplo claro lo muestra Frazer en su libro "La rama dorada", donde se narra una leyenda que dice que en Aricia, Italia, un sacerdote, esposo de la diosa Diana, vivía en el bosque junto a un roble sagrado y que éste recibía el título de rey del bosque. Cuenta, además, que para acceder al trono y después conservarlo, tenía que luchar a muerte con sus adversarios.
La mitología finlandesa, afirma que los robles fueron creados por su dios Vainamoinen, con el fin de dar sombra y cobijar a los pájaros. Según algunos estudios, la palabra “roble” y “puerta” se designan bajo un mismo vocablo en diferentes lenguas indoeuropeas. Según Robert Graves, el Dios Jano es el protector de esta puerta.
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